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¡Jekiri!

by Antonio Murga

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1.
Batiri 02:24
2.
Jekiri 01:32
3.
Enkile 01:31
4.
Hentirii 03:18
5.
Sikoru 02:11
6.
Shaarka 02:31
7.
8.
Bateki 01:01
9.
Sibaki 04:26
10.
Onini 03:15
11.
Tinku 02:55
12.
Surii 03:21
13.
Laliki 04:48
14.
Kori Kuk 05:55

about

SHAARKA - SACRIFICIO

Cuando un nativo da caza a un jekiri toda la actividad normal del poblado batiri cesa y se transforma en fiesta y algarabía. El cazador llega a la aldea con la presa dentro del guk escoltado por sus compañeros, dirigiéndose en primer lugar a la casa del chamán, y éste, al comprobar que se trata de un ejemplar auténtico da el visto bueno lanzando un alarido: ¡Jekiri!, entonces todos los nativos se congregan frente a la hatpa y las trompas de roca empiezan a rugir. El chamán danza preparando el círculo mágico, un anillo de piedras donde se procederá a la ceremonia Shaarka o de sacrificio del hijo-alma. Es un momento tenso, el jekiri está inutilizado en el centro, el brujo desenvaina el enorme suk sagrado y corta en dos al animal. La cabeza de pez es ensartada en el arma y ofrendada a Rakoa, para pasar luego a manos del apresor. El resto del cuerpo de la víctima es desprovisto de las plumas, que son lanzadas al aire... y es descuartizado. La ingestión de su carne proporciona a los Batiri fe y fuerza espiritual. Tras la inmolación, ya solo quedan algunas plumas esparcidas frente a la hatpa. Pero el espíritu del jekiri sigue estando presente.

ENKILE- LA INICIACIÓN
Hasta los 15 ghoni un Batiri no puede subirse a la pértiga a la espera del jekiri, ni tener un guk, ni un suk, la daga sagrada que espera al hijo-alma. Para llegar arriba del mástil, el joven ha de pasar un periodo de iniciación que comienza a los nueve ghoni aproximadamente y que se llama Enkile. El niño atravesará por experiencias y rituales muy desagradables, todos ellos relacionados con el arte de cazar un jekiri: cómo conseguir un buen emplazamiento, quizá legado por algún familiar, cómo mantener la pértiga estable... compañeros que sean amistosos, buena vista y mucha suerte son otras cuestiones a tener en cuenta. Las pruebas y rituales del Enkile se llevan a cabo en el más riguroso secreto y son practicadas en las hatpas o casas de los espíritus, recintos prohibidos a los no-iniciados, donde además del Enkile se guardan celosamente las trompas de roca o nuks, cuyo sonido provoca la libre vía hacia el trance requerido para alcanzar nuevos niveles en la iniciación. En los rituales chamánicos, las trompas son tocadas ocultas a la vista por grandes palmas, creando un misterioso diálogo entre ellas. A los 15 años o ghoni, el Batiri ya está listo para encontrar su pasaporte al Hentirii, y lo que es mejor, poder emparejarse con una joven de la aldea o alrededores.
HENTIRII - EL PARAISO

Las palmeras te llevarán al sol
Cascadas de agua brotan del fuego
El suculento manjar sobre las rocas azules
En el reino de Rakoa, el Hentirii

Un ancestral poema que describe escuetamente el aspecto del paraíso Batiri. Un edén sólo apto para aquellos que en vida tuvieron la fortuna de capturar un hijo-alma. El Batiri difunto, el Bateki, accede al Hentirii cubierto de plumas y escamas de jekiri, el guk a la cintura y el cráneo de su guía entre las manos. La ceremonia suele prolongarse durante varios dias, con ofrendas al difunto acompañadas de distintos bailes del ritual Makiri, tras lo cual se reune una comitiva que acompaña al Bateki hasta la entrada de las entrañas de Sikoru, inmensa fosa submarina donde habitan los jekiri. El bateki es hundido mediante piedras de más de 50 kilogramos que le son atadas a los tobillos. Envuelto en una áspera piel de escualo que le dará valor en la eternidad, nadará hasta buen puerto. El Batiri muerto ha llegado al Hentirii... ahora anda entre doradas palmeras, peces y frutas de colores sobre rocas azules, y arroyos de agua cristalina hasta donde alcanza la vista. Ahí está Rakoa, el incandescente, manando agua por sus poros, con los espíritus de los hijos-alma aleteando a su alrededor entre las palmeras, cantando los poemas en lenguas Batiri.
MAKIRI- EL RITUAL
El chamán es el jefe espiritual Batiri, y suele acceder a tal posición heredándola de su padre. Algunos de sus familiares, e incluso pacientes, le pueden proporcionar algún ejemplar de jekiri, por lo que no necesitan más para acceder al Hentirii. Además se supone que está en contacto directo con Rakoa y los hijos-alma, lo que le confiere un alto grado de poder sobre los nativos. El chamán organiza y dirige las ceremonias Bateki y los sacrificios del jekiri, así como también se encarga de la cura de males o heridas que afecten a los miembros del poblado. En cuclillas, el brujo tira al suelo una serie de fetiches, con conchas de moluscos, raspas y plumas de jekiri, con el propósito de obtener una clara visión del futuro que le espera al batiri. En el caso de la ceremonia Bateki, se danza al son de las nuks. En el rito makiri, el chamán se suele acompañar de un extraño cuenco lleno de hauli, licor que extraen fermentando la savia de la palma, cuyo bebedizo final posee una elevada graduación alcohólica. El éxtasis se produce en el transcurso de la ceremonia, y el ebrio fuego se transmite a todos los presentes... es el momento de apaciguar calor y dolor, y proceder sin paliativos a la inmersión del bateki. Todos se dirigen a la gran fosa Sikoru, el hogar de los hijos-alma.
EL HIJO-ALMA
El animal sagrado de los Batiri, mitad ave, mitad pez, es el jekiri, salvoconducto para llegar a Rakoa y su paraíso, privilegio que se alcanza en el preciso instante de capturar un espécimen. Una tarea agotadora y muchas veces desesperanzadora, que llega a enloquecer a algunos nativos, poseídos por una especie de amok. Cuando no da tiempo a contar con la intervención del chamán, las cegadas víctimas corren a despeñarse desde el Okui, como alivio más inmediato. El jekiri llega a estos mares procedente del norte en busca de los crustáceos y moluscos abundantes en estas costas. Se trata de una rara avis cuya fisiología escapa a todo tipo de clasificación biológica. Algunos ornitólogos lo han calificado como duckfish, mientras algunos investigadores oceánicos lo han dado en llamar piscem palmipedus. Lo cierto es que ninguno de ellos ha conseguido tener entre sus manos tan singular criatura, tan sólo observarlos amargamente en la distancia. Los Batiri son un pueblo muy belicoso y no se andan con contemplaciones a la hora de alejar de la zona de pesca a cualquiera que no pertenezca a su hermético clan, sobre todo durante la temporada ghoni. Argumentan que los jekiri les pertenecen: necesitan estar lo más cerca posible del espíritu de Rakoa y llegar a sus jardines con el cráneo seco del hijo-alma. Al Batiri, que en su vida consigue jekiri alguno, sólo le queda conformarse con las patas que pueda reunir, para ayudarle a volver a nacer reencarnado en un niño o un jekiri.
SAPILE - POEMA


Sapile hauli Sikoru


Batiri hatpa Okui

Makiri ghoni Enkile
Nuk Jekiri Bateki

Rakoa Kaanyu suk

Shaarka Hentirii guk





INDICE






Los Batiri...................................................................................5

El Hijo Alma..............................................................................6
Enkile – La Iniciación................................................................7

Hentirii – El Paraíso...................................................................8

Makiri – El Ritual.......................................................................9

Shaarka – Sacrificio...................................................................10

Sapile – Poema...........................................................................11


LOS BATIRI

Los miembros del pueblo de las pértigas o Batiri son, según la leyenda, los descendientes del primer hijo-hombre de Rakoa, dios del agua que nace del fuego. Tal adoración por parte de los nativos sumergirá a éstos en el Hentirii, un extraordinario paraíso subacuático donde el agua mana de las brasas, el licor de doradas palmeras, y los manjares de rocas azules. Pero el dueño del espíritu es el Jekiri, el hijo-alma, único guía del último y definitivo viaje. Sin él no hay acceso al Hentirii. Los Batiri se apostan en sus estacas sobre el Okui, un pequeño peñón rocoso abrazado por hidras donde, en la temporada de crecidas, en ghoni, se ven saltar a los jekiri, acercándose hasta que pueden ser capturados, posibilidad muy remota, máximo uno o dos al año. Estos extraños seres son escurridizos y difíciles de cazar, pero aquel que lo logra se ve recompensado con las rocas azules del éxtasis y las palmeras que llevan al Kaanyu, al sol. La voz del Jekiri resuena en el horizonte, donde sus saltos de más de 10 metros de altura exaltan a los indígenas, que gritan absortos ante la visión de su emblemático animal. Si algún nativo tiene la buena fortuna de hacerse con un Jekiri lo guarda en su saco sagrado, el guk, normalmente provisto de cuerdas de tripa y algunas conchas de moluscos que golpean a modo de reclamo, y se lleva a la aldea donde seguro ya ha llegado la noticia. Así comienzan los preparativos para la ceremonia animista del sacrificio o Shaarka, donde el espíritu del Jekiri pasará a formar parte del alma colectiva de la aldea tras la ingestión de su carne, pasando la cabeza de pez a propiedad de su captor, que la conservará a buen recaudo hasta el final de sus días, cuando haya de partir hacia el Hentirii.








Título original: ¡Jekiri!

© Antonio Murga, 1998.

Cubierta Jekiri, collage original de A.Murga

Maquetación: SJC









GLOSARIO

Bateki: Batiri difunto
Enkile: periodo de iniciación de los jóvenes Batiri
Ghoni: temporada de crecidas. En lengua Batiri, equivalen a un año
Guk: saco sagrado de los Batiri, donde se introduce el Jekiri tras su captura
Hatpa: casa de los espíritus, donde se practican los rituales de iniciación
Hauli: licor extraído de la palma, de alta graduación alcohólica
Hentirii: paraíso Batiri, donde moran Rakoa y los Hijos-alma
Jekiri: animal sagrado del pueblo Batiri. Híbrido entre pez y ave, es indispensable para acceder al Hentirii
Kaanyu: el sol
Makiri: ritual chamánico
Nuks: trompas de roca. Su grave sonoridad invita al trance
Okui: pequeño peñón rocoso donde los Batiri esperan la llegada del jekiri
Rakoa: divinidad de los Batiri que habita en el Hentirii
Sapile: ancestral poema Batiri
Shaarka: sacrificio ritual del jekiri
Sikoru: gran fosa submarina, destino del Bateki, en cuyas profundidades habita Rakoa
Suk: daga sagrada de los Batiri
¡JEKIRI! Ha sido realizado y producido con el mayor respeto hacia los pueblos de las naciones indígenas, y es en especial un homenaje a los nativos de Amazonia: Kararaho, Mororos, Korubos, Karapalos, Yawalapiti, Parakana, Karajas, Parecis, Kapayos (Xicrin), Javiro, Xicao (Mato Grosso), Villaboas (Xingu), Yanomami (Venezuela), y todos aquellos pueblos aún por conocer.
ANTONIO MURGA: sanza, bajo, guitarra de Pernas, berimbao, cintas, ocarina, cd’s, objetos, voz, percusiones, palo de lluvia, vasija de barro, teclados, reclamo de pato real
NOIKO: programaciones, samples, delay, lp’s (1-8)
MANUEL VAZQUEZ: djembe, percusiones (9, 10, 12, 13)
Artistas invitados: *Fanny Cochrane (aborigen de Tasmania, 1899), **chamán Yanomami (Venezuela), ºKorubos + tradicional Javiro, ^Yawalapiti, º*Kararaho, (Amazonia), ººaborigen de Papua (Sepik), ”muecín (Irán), º”Ganges (Benarés), *^Jahawarlal Jha (India del Norte), ^^aborígenes de Vanuatu. Otros invitados: aullador rojo (Guyana), insectos, zorzal akalat, papagayo jacko, león (Botswana), cercopitecos (Gabón)
1-8 Grabados en Noise & Co, Sevilla, VIII-IX, 1998 por Noiko, 9-14 en Radio K+Sutra, I-IV de 2000 por S. Martínez, y 15-16 en Smellin’Cat Studio. Remasterizado en 2002/03.

1.-BATIRIº 2:25 9.-SIBAKIº”” 4:21
2.-JEKIRIºº 1:30 10.-ONINI** 3:05
3.-ENKILE 1:25 11.-TIKUN”” 2:53
4.-HENTIRII* 3:12 12.-SURIIº* 3:17
5.-SIKORU 2:05 13.-LALIKI*^ 4:45
6.-SHAARKA 2:20 14.-KORI-KUK^ 3:53
7.-SAPILE/MAKIRI** 3:12 15.-EPILOGO^^ 4:57
8.-BATEKI 0:59 16.-SURII (video)

credits

released April 3, 2003

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all rights reserved

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about

Antonio Murga Seville, Spain

Musician,poet,videoartist, critic.Makes radio on experimental music .Plays at Batiscafo (gruppoungido.org)and Trance Hunters. More than 20 self released cd’s. The book of visual poems El Arte Encubierto (Biblioteca CyH) is a must. RTVA Creación Audiovisual Andaluza Award (2004).performs at LEM, Sensxperiment, Escena Contemporánea, Nits d’Aielo i Art, In Sonora, FIL Málaga, Nocturama, Intr:muros ... more

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